Bienvenido Gent amb gent

juan_bta_codina_basCuando nace un libro hay que darle le bienvenida y felicitarnos por la ocasión que deparan los tiempos actuales, en plena crisis, de que aparezca algo que cuesta dinero, porque imprimir un libro no es algo barato hoy. Los niños rápidamente se rodean de las personas que les quieren y con los libros sucede lo mismo. Los niños tienen padres y los libros también, en este caso dos madres, pero madres de un libro. Los niños necesitan entrar en sociedad y los libros también. Pero tanto unos como otros necesitan del calor afectivo para desenvolverse y desarrollarse. En este caso el calor afectivo está asegurado porque Gent amb gent nace con proyección casi familiar, en función de la procedencia de lo que contiene el libro.

Amparo Botella publicó en 2008 un primer libro de esto que auguramos una colección de futuro y con futuro basado en una idea original suya tomando como fuente las fotos antiguas que aparecían en Semanal Jávea. Ahora ha vestido de largo esta colección con un segundo volumen formado por esas entrañables fotos que cada familia guarda en un viejo álbum, de su pasado. En ese álbum, muchas veces casero, las fotos en ocasiones pegadas con miga de pan – cuando no había pegamentos ni colas, ni cel-lo ni otros recursos por las penurias de la época –, muestran un relato de la historia familiar donde se pueden ver a los vivos con otros que lo fueron, a la abuela y al nieto, al tío y al sobrino, a veces solos, a veces con amigos o con un juguete o formando parte de un paisaje que indica cariño y ternura; los amores tempranos de la adolescencia o la impronta del servicio militar, las faenas caseras o los juegos de calle… la tierra desnuda del pasado o la tierra poblada y habitada, el campo y la torre de la iglesia…

Tanto Antonia Bisquert Cruañes como Amparo Botella Moreno han hecho una selección de fotos que muestra una panorámica de la historia y de la sociedad de Xàbia. Y la han hecho muy bien, teniendo presente que esto es una colección de libros abierta, porque no han cargado las tintas en un aspecto, sino que a lo largo del libro van apareciendo retazos del pasado. Pero igual que esos tapices que se hacen con trozos de tela, también este libro se ha hecho con trozos de realidades humanas.

Publicidad

El libro se convierte en testigo de un paisaje que ya no existe, porque se ha poblado de forma abusiva, pero es un paisaje lleno de cariño y afecto. Nos muestra desde los automóviles que han pasado de moda hasta lugares entrañables o eventos apoteósicos como la celebración del II Centenario de la venida del Nazareno; desde la primera comunión o la boda hasta esas fotos escolares que querían perpetuar las amistades surgidas en la escuela con el maestro. Los antiguos oficios o las fiestas…

Pero este libro no surge de la nada, sino de la capacidad de convencer a los vecinos del pueblo para que faciliten esas fotografías que andan en el baúl de los recuerdos. Porque ese si que es un trabajo arduo y fatigoso, pues a veces no se desea hurgar en ese baúl precisamente por los recuerdos que trae a quien los busca y hay que ganar voluntades para conseguir este resultado.

Mi felicitación a las dos autoras y mi enhorabuena a una villa que puede a través de estos libros conservar y mirar ese pasado del que todos formamos parte. Porque además este pasado, ha podido constituir en estas fechas de inicio de año, de Reyes, un presente (regalo) para los amigos y familiares y desde ese regalo (presente) construir el presente que vivimos cada día, porque ayer ya pasó y mañana aun no ha venido.

Suscríbete al boletín de noticias

Pulsando el botón de suscribirme aceptas nuestras Política de privacidad y Términos del servicio
Publicidad