El abandono de la Junta de Gobierno Local de Pego hecho público por parte del grupo municipal de Compromís ha provocado la enésima disputa dialéctica entre este y el del PSPV.
La asamblea local valencianista se descolgaba alrededor del mediodía con un comunicado en el que explicitaba la decisión tomada por sus integrantes para que el portavoz de Compromís, Víctor Climent, dejara de formar parte de este órgano de asistencia retribuida para los concejales que no cuentan con dedicación. Según han remarcado, “la inclusión de los partidos de la oposición en la Junta de Gobierno es una novedad en la historia reciente de Pego que el alcalde vendió como una manera de mejorar el control de la oposición al gobierno y alcanzar acuerdos entre todos los partidos, y la decisión de renunciar a nuestro puesto en la Junta se ha tomado tras comprobar que ninguna de esas condiciones se ha cumplido”.
En esa dinámica, consideran que la legislatura que comenzó en 2023 ha estado marcada por el pacto de investidura para la alcaldía de Enrique Moll (PSOE) con el PP, el cual, “como ya viene siendo costumbre, en cada legislatura tenemos acuerdos de gobierno basados en el reparto de sueldos y cargos, en lugar de un programa de gobierno para los cuatro años, y la actual legislatura no ha sido una excepción, ya que el PP condicionó la investidura de Enrique Moll a una serie de beneficios económicos”. Entre ellos citan, a su entender, “la sobrerrepresentación de dos miembros en la Junta de Gobierno con 1.000 euros mensuales cada uno”, la subida de sueldos e indemnizaciones por asistencia de todos los concejales y concejalas y la creación de nuevas comisiones, en las que el número de miembros no se ha reducido a pesar de existir solo tres partidos cuando antes había cinco.
Para la asamblea valencianista, “así se consolidaba la dinámica de la legislatura en la que el PP aprueba todo lo que propone el PSOE, asegurándose las remuneraciones pactadas y, como consecuencia, el pueblo y el Ayuntamiento pagan un incremento sustancial del coste político del consistorio”.
Además, denuncian que, en lo que respecta al funcionamiento de la propia Junta de Gobierno, el alcalde había eliminado las anteriores competencias de este órgano, que, a su juicio, “ahora solo trata cuestiones sobre las que los concejales y concejalas no podemos ejercer ningún control ni aportar propuestas, como otorgar plazas en el Parking Municipal, conceder tarjetas de estacionamiento a personas con movilidad reducida, ratificar licencias de obras de particulares o certificados de obra pública”.
No obstante, señalan que el hecho que desencadenó la decisión de abandonar la Junta fue la negociación del presupuesto municipal de 2025, donde denuncian que “a última hora, y sin más explicaciones, el equipo de gobierno se desmarcó de todo lo que se había acordado y se lanzó a los brazos del PP, que vio aprobadas sus propuestas en el pleno de presupuestos”.
Asimismo, tratan de justificar la aceptación del puesto en la Junta de Gobierno en aras de que “era una oportunidad para impulsar nuestro proyecto para Pego y tener un mayor control de la acción del equipo de gobierno, pero ahora sabemos que estar en ese órgano no marca ninguna diferencia y solo sirve para justificar las remuneraciones de sus miembros; por tanto, si PSOE y PP pensaban que hemos estado dentro de la Junta de Gobierno para asegurarnos un sueldo extra cada mes, estaban equivocados. Nosotros no nos dejamos comprar como hacen otros y asumimos que nos toca impulsar un proyecto alternativo para nuestro pueblo y ser la oposición a este gobierno encubierto”.
Los términos de la renuncia han provocado la reacción del ejecutivo presidido por Enrique Moll para manifestar que no les sorprende una decisión que enmarcan en un patrón electoral derivado del hecho de que “las elecciones municipales están cada vez más cerca y entendemos que Compromís quiere desmarcarse y no sentirse eclipsado por el Ayuntamiento del PSPV

A pesar de ello, han lamentado que forme parte “solo de una estrategia política, porque desde el inicio de la legislatura la Junta de Gobierno ha funcionado de la misma manera, han estado dentro de ella, cobrando y sin mostrar nunca la opinión que ahora manifiestan en la prensa”. En esa línea han definido como “inoperante” la participación de los representantes del grupo valencianista en la citada Junta durante los casi tres años de legislatura, “porque no han presentado nunca ninguna propuesta ni han aportado ideas; en definitiva, no han colaborado de forma activa en mejorar nuestro pueblo”.
En lo que respecta al vaciado de contenido del órgano de gobierno, desde el PSPV replican que “en estas reuniones se han tratado temas de todo tipo, urbanísticos, económicos, sociales, y siempre se ha permitido opinar y aportar propuestas y soluciones a los problemas, aunque no se ha recibido ninguna de ellas por parte de los miembros de Compromís”.
Los socialistas atribuyen la postura de estos a “no haber superado aún haber perdido las elecciones municipales de 2023, donde fueron la última lista en cantidad de votos”, para recordar que tras esos comicios se conformó la representación en el pleno según los resultados electorales y así se hizo también en la Junta de Gobierno. Idea que, según reivindican, “surgió del PSPV y, por tanto, ¿pretenderán los miembros de Compromís que se les dé más representación en la Junta de Gobierno que al resto de partidos cuando fueron la fuerza política menos votada por los vecinos y vecinas de Pego?”.
En cuanto al detonante de la negociación del presupuesto de 2025 aludido desde las filas valencianistas, el grupo del PSPV matiza que ideas como las mejoras de la piscina, del proyecto de la calle de pelota o de la búsqueda de alternativas provisionales para el teatro ya contaban previamente con un equipo de gobierno, que pidió a los dos grupos de la oposición que, para la confección del documento de ingresos y gastos del presente ejercicio, aportaran propuestas que posteriormente el equipo de gobierno estudiaría e intentaría incluir, siempre que fuera posible.
En concreto, detallan que el Partido Popular presentó 23 propuestas, de las cuales el equipo de gobierno aceptó 17, mientras que Compromís presentó un total de 11 propuestas, de las cuales se dio luz verde a 9, y señalan que hay que remarcar que muchas de las propuestas aportadas por ambos partidos coincidían. “Creemos que el porcentaje es elevado y que hemos trabajado para llegar a acuerdos”, señalan, para lamentar que, a pesar de la elevada aceptación que ello suponía, ambos partidos decidieron no votar a favor y no respaldar sus propias propuestas.
Finalmente, la nota del equipo de gobierno aborda las constantes insinuaciones de Compromís respecto al pacto entre el PSPV y el PP, para advertir que “lo que hace el PSPV con el PP es política, la cual consiste en debatir, buscar acercar posturas para mejorar el pueblo, mientras que Compromís nunca lo ha hecho. Creemos que esa es la línea a seguir, porque desde el minuto 1 apostamos por gobernar en minoría y eso implica llegar a acuerdos si se quieren dar pasos adelante”.
Asimismo, recriminan a los valencianistas “no haber estado a la altura de la situación” en alusión a la oferta de pacto hecha desde sus filas al Partido Popular al inicio de la legislatura para que el equipo de gobierno del PSPV se quedara sin sueldo. Circunstancia que, a su entender, contrasta con “la predisposición del grupo socialista a llegar a acuerdos, a dialogar, a trabajar de la mano, pero ellos nunca han demostrado interés, aunque seguiremos haciéndolo, por ejemplo en la negociación de los presupuestos de 2026, entre muchas otras cosas”.







