La alcaldesa de Calp, Ana Sala, ha remitido una providencia al departamento de Recursos Humanos con el fin de que redacte un pliego técnico y administrativo para contratar los servicios de vigilancia y seguimiento de las bajas laborales en la plantilla municipal. Se establece también que la duración del servicio se planteará para dos años y uno prorrogable. El objetivo de esta medida es reducir, en la medida de lo posible, el absentismo laboral, según aseguran fuentes oficiales.
En el documento se señala que, a través del departamento de Recursos Humanos, que el nivel de absentismo laboral en el Ayuntamiento de Calp alcanza el 10% y supera la media del sector. Por ello, desde Alcaldía se ha considerado la necesidad de mejorar la gestión de los procesos de seguimiento de las bajas laborales. La plantilla cuenta con cerca de 500 trabajadores.
Sala, ha señalado que “llevamos detectando ya hace tiempo, con los informes que nos ha estado facilitando la Mutua, que el nivel de absentismo supera la media del sector de la administración pública y que no hay forma de reducir esos índices”. “Ha llegado el momento”, continúa la alcaldesa, “de poner remedio a esto y evidentemente habrá bajas justificadas y las habrá que no estén justificadas. Lo único que pretendemos es hacer seguimiento y controlar que son bajas reales y efectivas”. 
Se trata, insisten las mismas fuentes, de optimizar los recursos. Sala asegura que “he intentado, a través de la Mutua, controlar y verificar que son bajas reales pero la Mutua hace lo que puede, la Seguridad Social no dispone de los mecanismos necesarios para evitar esto y una administración pública, que gestiona dinero y recursos públicos, estos índices de bajas laborales no se los puede permitir”.
