Acercar la institución Síndic de Greuges a la ciudadanía. Este era el objetivo de una charla organizada por la Junta Veïnal de Moraira Cap d’Or y para ello contó con una de sus socias, Concha Bru Ronda, que ejerce como adjunta primera al Síndic de Greuges, Ángel Luna. La conferencia se desarrolló en una de las aulas del Espai La Senieta y sirvió para dar a conocer el funcionamiento y los servicios públicos y gratuitos del organismo. Además, Bru analizó las cuestiones que afectan a la ciudadanía y que son objeto de quejas presentadas al Síndic, ante la posible vulneración de sus derechos y libertades.
El Síndic de Greuges es el Defensor del Pueblo en la Comunitat Valenciana y vela por el cumplimiento y resto de los derechos y libertades. Bru comentó que “no podemos dictar sentencias como los jueces, pero podemos convencer con nuestros argumentos y resoluciones y proponer modificaciones legales”. Es decir, el Síndic tiene autoridad moral, por decirlo de alguna forma. La institución tiene independencia funcional, es de acceso universal y gratuito, sus decisiones no son recurribles y los poderes públicos tienen el deber de colaborar con ella.
El sujeto pasivo de las investigaciones del Síndic es la administración pública, es decir, la administración de la Generalitat, las universidades públicas, las administraciones locales, los medios personales y materiales de la administración de justicia y las personas físicas o jurídicas que gestiones servicios públicos. La adjunta primera subrayó las diferentes causas de no admisión de las quejas, tales como cuestiones que excedan del ámbito competencial del Síndic; quejas anónimas; cuestiones sobre las que exista resolución judicial; cuando haya transcurrido más de un año; en actuaciones judiciales en trámite; y cuando no se aporten los documentos requeridos. Además, se tiene en cuenta también si las quejas carecen de fundamento o pretensión concreta, se aprecie mala fe o uso abusivo y cuando puedan perjudicarse derechos o intereses de terceras personas.
Observatorio de la vulnerabilidad
Bru remarcó el papel del Observatorio de la Vulnerabilidad, concebido como un espacio vivo de comunicación para mantener un contacto permanente con profesionales de entidades e instituciones así como con expertos de los ámbitos de la discapacidad, dependencia, atención a personas mayores, migrantes, mujeres y otros colectivos en situación de especial vulnerabilidad. Y todo para conocer, analizar y valorar los problemas que diariamente les afectan. Este Observatorio elabora investigaciones e informes para analizar asuntos, situaciones o problemáticas en las que se producen vulneración de derechos y, además, promueve actuaciones concretas y/o cambios normativos.
Las estadísticas oficiales recogen que en 2024 se presentaron un total de 4.770 quejas por la ciudadanía, la mayoría a través de la web o sede electrónica. De las admitidas a trámite, las referidas a Servicios Sociales fueron las más numerosas, con un total de 1.888. De otras materias como Transparencia, Servicios Públicos y Medio Ambiente, Empleo, Educación, Vivienda, Urbanismo, Sanidad, Hacienda Pública, etc., son las restantes. “En general”, subrayó Bru, “la distribución de quejas por materias es similar a lo largo de los años. Pero se aprecia un aumento sostenido en Servicios Sociales desde 2022, que se ha acentuado fuertemente en 2024”. El 58,03% de los asuntos y quejas planteadas se resuelven tras su cierre.
Como ejemplo, Bru se refirió a quejas de Teulada Moraira sobre licencias medioambientales, recogida de residuos urbanos, ruidos por obras, limpieza de canalización de pluviales, ubicación de contenedores y falta de transporte al Centro Ocupacional.