Los ayuntamientos de Dénia y Els Poblets harán una nueva actuación para eliminar los problemas de estancamiento de aguas y algas en la desembocadura del río Girona. Los municipios financiarán y crearán una barrera natural de cantos rodados en la desembocadura, como ya se hizo hace dos años.
La reconstrucción de este muro natural, según se demostró en su día, impide el colapso de la desembocadura causado por la acumulación de algas y los consiguientes problemas de mala olor y concentración de insectos.
La medida fue acordada el lunes durante una reunión entre los alcaldes de Dénia y Els Poblets, Vicent Grimalt y Carolina Vives; la jefa provincial de Costas, Rosa de los Ríos, y el comisario de Aguas de la CHJ, Marc García. También estuvo presente el concejal de Playas de Els Poblets, Salvador Sendra. Todos ellos coincidieron en que el problema, que se repite cada verano, se debe al espigón de la desembocadura, que facilita que las algas se adentren río adentro y al mismo tiempo impide que vuelvan a ser arrojadas al mar.
La CHJ ha anunciado que completará la actuación con la extracción de la posidonia acumulada en el Girona.