Algunas profesiones están muy bien pagadas porque además de los conocimientos adquiridos con los estudios y experiencia tienen el añadido de la creatividad, un bien escaso que no está al alcance de cualquiera a la vista de cómo tenemos a la sociedad en que vivimos.
Dado que no existen carreras para ser políticos especializados en las distintas categorías que se necesitan, cualquiera puede ostentar cargos donde sus decisiones pueden ser la clave del buen funcionamiento de las distintas áreas en que se divide el bienestar ciudadano. 
No siempre es necesario un título para una cartera, pero sí una muy buena gestión con un mejor asesoramiento. A la vista está que estoy escribiendo en chino para una gran parte de la política de España.
No necesariamente un médico sabría llevar la cartera de Sanidad porque tal vez no sepa gestionar, que es la otra parte de la forma de llevar un ministerio.
Si bajamos a Comunidades y Ayuntamientos, sería imposible encontrar en cada pueblo gente preparada para gestionar con el conocimiento suficiente como para solucionar.
Así, las cosas se arreglan como en el bar, en casa o en la tienda, un poco a las bravas y al dudoso criterio de quien le toque cada vez.
Así son los desastres en urbanismo o en las decisiones de cerrar los horarios de un parque porque una vez en mil años hubo vandalismo.
Las playas para perros o las nudistas, un disparate social debido a que quienes deciden nunca se pondrían en pelotas delante de una multitud y tampoco tienen perro.
Surgen alcaldes desde las tertulias a gritos de los bares, de un banco o una farmacia, acomodan más o menos a familiares y amigos con la excusa de ser gente de su confianza, esos mismos que tampoco jamás bajaron en pelotas a las playas ni tienen perro.
También están los que no viven en las zonas donde realmente hay problemas de tráfico, dando soluciones absurdas a problemas añejos porque jamás los vivieron en primera persona ni tienen la capacidad, por experiencia o estudios, para solucionarlos.
Hay lugares que son muy atendidos, aunque muy mal resueltos, pero se insiste una y otra vez porque la Generalitat dio dinero para mejoras urbanísticas en ese tramo concreto, entonces lo que estaba mal se remienda varias veces hasta dejarlo peor y otras zonas quedan eternamente olvidadas.
Estos resultados son por la falta de una condición que nace con el ser humano pero que no todos la han podido desarrollar.
«La Creatividad», tan escasa y necesaria cuando ya no quedan conocimientos por estudios o experiencia.
La creatividad es la clave del éxito en los emprendimientos, es la gran ausente en este mundillo de politiquillos que oyen y leen sin hacer caso a nada que no provenga de su propio entorno, escudados en el protocolo, protegidos de sus vergüenzas a salvo de las miradas.
Orgullo absurdo, medalleo de poderes en los sótanos del gran escenario al que jamás podrán acceder salvo unos muy pocos privilegiados beneficiados por un dedo o la mirada del amiguismo que les permite ascender.
