Un sector crítico menguado y el voto delegado dan alas a la directiva de Benavente para sacar adelante todos los puntos del orden del día
El Dénia celebró una asamblea de socios con escasa asistencia, en un ambiente prácticamente familiar. Fueron muy pocos los socios presentes en una cita en la que el presidente, Juan Benavente, aprovechó para poner de manifiesto su gestión al frente de la entidad. Uno a uno, los puntos del orden del día fueron aprobados, ya que el presidente hizo uso del voto delegado de los socios que no acudieron a la asamblea.
Por primera vez en mucho tiempo, el equipo de Benavente salió triunfante de una asamblea de socios, mucho más tranquila que las anteriores, con todos los puntos aprobados sin grandes sobresaltos.
El sector crítico, minoritario en esta reunión, mostró su disconformidad con los acuerdos adoptados y advirtió de la posible impugnación de la asamblea, al considerar que el presidente y el club se encuentran inmersos en un proceso judicial tras el recurso presentado por el CD Dénia contra una sentencia que obligaba a convocar a los socios para tramitar la moción de censura. El socio que presentó dicha moción, Pepe Carpi, no participó en esta asamblea. Desde el sector crítico se considera que la sentencia les es favorable, a la espera de que prospere o no el recurso del club ante la Audiencia Provincial.
Benavente mostró su convencimiento de que completará su mandato al frente del club, aunque una temporada más su gestión continúa incrementando la deuda en la situación económica de la entidad.







