MARIANO MARTÍN-LOECHES DE LA LASTRA (*)
La Agencia Española del Medicamento ha informado de que se va a iniciar el proceso de revisión de la seguridad de los anticonceptivos hormonales orales combinados que contienen los gestágenos llamados de tercera y cuarta generación (desogestrel, gestodeno, norgestimato, drospirenona o nomegestrol), así como de aquellos que contienen acetato de ciproterona.
Es un hecho aceptado que “la utilización de anticoncepción hormonal combinada se asocia con un incremento del riesgo de tromboembolismo venoso, y que el riesgo relativo es diferente en función del preparado utilizado”. Y en cualquier caso, mucho menor que el riesgo de tromboembilismo durante el embarazo y especialmente durante el puerperio.
Las diferentes combinaciones de anticonceptivos orales tienen un riesgo relativo diferente de tromboembolismo venoso, este riesgo es menor para combinaciones con levonorgestrel, noretisterona y norgestromina frente al de dienogest, gestodeno, drospirenona o desogestrel.
La reducción de las dosis de estrógeno en los anticonceptivos hormonales disminuye el riesgo relativo de tromboembolismo venoso. Para minimizar este riesgo se deben utilizar preparados con baja dosis (EE 35 microgramos o menos). Teniendo en cuenta que el riesgo de tromboembolismo venoso, en términos absolutos, es muy bajo entre la población en edad fértil, el uso de este grupo de anticonceptivos puede considerarse seguro para la salud de la usuaria, con independencia del preparado elegido.
La SEC (Sociedad Española de Anticoncepción) quiere manifestar que no se han aportado datos ni evidencias nuevas que hagan modificar las recomendaciones referidas, instando a seguir utilizando todos los productos autorizados y disponibles en nuestro país a fecha de hoy. Bien entendido, todo ello, que es necesario realizar una adecuada historia clínica a la posible usuaria, con el fin de identificar las circunstancias que puedan predisponer al tromboembolismo venoso, en cuyo caso el tratamiento anticonceptivo debe valorarse y de esta manera se minimizan los riesgos antes de su prescripción.
(*) Especialista en Obstetricia y Ginecología.