La enseñanza del valenciano en las aulas, un tema tan polémico y de actualidad, ha protagonizado el debate de este jueves en las ondas de Onda Cero Marina Alta, conducido por Alba Alborch y Sergio Dénia. Cuatro voces representativas de diferentes posturas de la comarca se enfrentaron para abordar el impacto de la nueva ley de plurilingüismo en el sistema educativo valenciano. Los invitados fueron Rafa Carrió, concejal de Normalización y Lingüística de Compromís, Félix Redondo de Vox, Jaume Fullana, representante de la CAPEV, y Susanna Mut, miembro de Gent de Dénia y activa en diversos consejos escolares.
La cuestión central fue el enfoque que debe seguir la educación lingüística en la Comunidad Valenciana, especialmente en lo que respecta a la implementación del valenciano como lengua vehicular en las aulas.
El debate sobre la imposición
Rafa Carrió (Compromís per Dénia) defendió con firmeza la necesidad de mantener el valenciano como lengua vehicular en el sistema educativo. «Los padres que quieren que sus hijos estudien en castellano tienen la opción de hacerlo, pero la sociedad valenciana debe apostar por el valenciano como lengua propia», afirmó Carrió. La postura del representante de Compromís subraya que el valenciano no debe ser una opción secundaria o minoritaria en las escuelas.
Por otro lado, Félix Redondo (Vox) expresó una visión diametralmente opuesta, acusando al sistema educativo de adoctrinar a los alumnos. Según él, «el objetivo de esta ley no es promover el bilingüismo, sino imponer una sola lengua, el valenciano, sin dar opción a las familias que prefieren que sus hijos estudien en castellano». Redondo criticó lo que consideró un «exceso de imposición» y cuestionó las políticas lingüísticas que, en su opinión, excluyen a una parte importante de la población que se siente más cómoda con el castellano.
El papel de las universidades y los expertos
El debate se intensificó cuando Jaume Fullana (CAPEV) intervino para resaltar la postura de los expertos y académicos. «Más de cuarenta consejos municipales se han manifestado en contra de la imposición del valenciano en la educación», comentó Fullana, subrayando la importancia de escuchar a la comunidad educativa. Además, recordó que diversos sindicatos, asociaciones de directores y universidades como la de Valencia han emitido manifiestos en contra de las políticas lingüísticas actuales, defendiendo que el sistema educativo debe garantizar una buena competencia multilingüe.
Por su parte, Susana Mut (Gent de Dénia) hizo hincapié en el consenso que existió en el pasado, cuando las políticas lingüísticas se decidían mediante el acuerdo entre todos los actores educativos. «Lo que debemos hacer es escuchar a los expertos», dijo Mut, apelando a la necesidad de construir un modelo plurilingüe que favorezca el aprendizaje tanto del valenciano como del castellano. Añadió que el verdadero reto radica en conseguir que los estudiantes dominen ambos idiomas de manera equilibrada, algo que, según ella, la ley actual no consigue.
El futuro del sistema educativo valenciano
Al concluir el debate, los participantes parecían coincidir en que la cuestión no es si el valenciano debe estar presente en las aulas, sino cómo garantizar que la enseñanza sea efectiva y respetuosa con los derechos de los estudiantes y sus familias. En palabras de Jaume Fullana: «La educación plurilingüe no depende del número de lenguas que aparezcan en el currículo, sino del número de lenguas que el alumnado acabe dominando». Un punto sobre el cual todos los participantes parecían estar de acuerdo, aunque con matices importantes.
Mientras tanto, la tensión persiste sobre qué modelo lingüístico debe prevalecer en las aulas del País Valenciano. La polémica está servida, y la discusión sobre el futuro del valenciano en la educación pública sigue siendo un tema de debate acalorado entre partidos, sindicatos, expertos y familias.
Puedes escuchar el debate completo en el siguiente enlace:







