
Hay algo aún peor que las prácticas gansteriles de estos partidos y es que después de estas estafas continuadas estamos pasmados. ¿Dónde están los abogados, los afectados por las acciones (que se las vendieron con unos números que no existían), las entidades, la sociedad civil? Aquí se venden acciones tóxicas escondiendo un agujero de millones, y nadie hace nada. Políticos que callan, interventores que no ven, sociedad civil que se despista…, ¿qué es esto?
Desde luego, hay veces que pienso que tenemos lo que nos merecemos.






