Alguien me puso sobre la Tierra para incordiar y Paco en esta página para analizar, desde mi opinión, el estado de las cosas (y así, obviamente, incordiar a más de uno).
Claro, las cosas no están muy bien y mis conclusiones parecen muy pesimistas, ya saben aquello que dice «un pesimista es un optimista bien informado».
Por más que leo, miro y oigo noticias del mundo entero, no consigo encontrar nada más divertido que las cosas que ocurren en nuestro país.
Nosotros las hacemos graciosas, porque realmente, gracia, lo que se dice gracia…poca.
En Estados Unidos encarcelaron a Capone pillándolo por un fraude fiscal, nada que ver con los asesinatos cometidos, no sabemos si Camps irá a la cárcel, pero lo pillaron por una docena de trajes, nada que ver con todo lo demás.
¿Qué es «todo lo demás»? ni idea, pero seguro que si le hubiésemos mandado un sms diciendo: «todo descubierto, cojo mis cosas y me voy al caribe», ahora estaría tomando el sol en alguna isla de aquella zona.
La imagen generalizada del español en el resto del Planeta es que somos escandalosos, por eso Iñaki hace honor a ello desde Washington, claro que seguramente no entendió bien a qué tipo de escándalo se refiere el resto del mundo.
Siempre comento que fui criado en Sudamérica, allí son Repúblicas, poco o nada se sabe de reyes y familias reales, a la vista de los últimos comentarios sobre Iñaki y la transparencia de los gastos reales de la familia de su suegro, se me ocurre que conozco media docena de personas que tienen una educación y formación muy similar a la del Rey que estarían muy dispuestas a hacer su trabajo por casi un millón de euros al año, gastos incluidos.
Con una rebajita así en los gastos públicos y algunos otros recortes en sueldos desmedidos e inútiles, menos donaciones más inútiles como las de Iñaki y algunos trajes más baratos, seguro que habría mucho más dinero en las arcas de quienes deben tanto dinero a los autónomos que tienen que cerrar porque no cobran las facturas emitidas a entidades públicas.
En fin, que a mis pocos pero queridísimos lectores (incluye lectoras, ya saben lo del género en gramática) les dejo estas líneas de alegría, sin duda, este país está perdiendo la seriedad, esto es un circo con un espectáculo para morirse de r