Cuando comienza a encararse la recta final de la presente legislatura en Pego, el alcalde Enrique Moll repasa los principales acontecimientos del actual ejercicio político para CANFALI MARINA ALTA. Fiel a su estilo directo, aborda cuestiones como el urbanismo, la situación de la agricultura, la dinámica de gobierno, el plan Edificant, el aplazamiento sine die del centro de interpretación del parque natural de la marjal por parte de la Generalitat Valenciana, la eliminación del punto negro del hostal de Sant Jaume, la construcción del futuro teatro municipal y otros asuntos que han formado parte del día a día de la gestión al frente del Ayuntamiento a lo largo del año.
–P: El año arrancaba con la desestimación del recurso de Compromís contra el Pego Golf… ¿El urbanismo es el principal motivo de las diferencias en el seno de la corporación? 
–R: Nosotros, como equipo de gobierno, sabemos el modelo de pueblo que queremos y la línea que debemos seguir para conseguirlo. Lo que no podemos hacer es ir cambiando de idea en función de futuras fluctuaciones. Por eso tenemos claro qué urbanismo queremos. Creemos que el pueblo necesita un impulso y que debe crecer a nivel poblacional de forma acompasada con la adecuada dotación de infraestructuras e inversiones.
En esa dinámica, somos conscientes de que va a ser necesario hacer un nuevo polígono industrial, porque el que existe se ha quedado pequeño, para que pueda servir de reclamo a las empresas para establecerse en nuestro pueblo y tratar de revertir la cadena de coches que salen todas las mañanas de Pego en dirección a Dénia o a Oliva, donde está el trabajo de muchos pegolinos. De hecho, ya contamos con alguna empresa puntera de la Marina Alta que ha dado los pasos pertinentes para invertir en nuestro pueblo.
–P: Cuando habla de “fluctuaciones”, ¿se refiere a alguna en concreto?
–R: Los gobiernos que he presidido han heredado una serie de proyectos, algunos de los cuales fueron aprobados con los votos del PP y del BLOC, estos últimos como antecesores de Compromís. Este equipo de gobierno únicamente se está limitando a llevarlos a cabo, porque la ley nos obliga a hacerlo. Por otro lado, este equipo de gobierno trabaja para hacer realidad proyectos y servicios importantes para nuestro municipio como la piscina y la guardería públicas, Acció Urgent, la ampliación de la residencia o la construcción del nuevo teatro. Proyectos que nos permitirán ser un pueblo más moderno y puntero, pero para poder hacerlo se necesita algún tipo de ingreso adicional que no sea únicamente subir los impuestos.
–P: O sea, que de la naranja no va a salir todo eso…
–R: La agricultura es un sector al que tenemos que apoyar y así lo dejamos patente en las reuniones del foro celebrado recientemente en Coopego, que hoy por hoy es una referencia a nivel nacional tras haberse completado la fusión con otras cooperativas y un motor económico muy importante para el municipio. Pero ese plus que nos daba hace un tiempo el campo a quienes tenemos un trocito de tierra hoy en día o bien se queda en tablas o se pierde. Y eso supone buscar alternativas, como actuar sobre superficies que no sean minifundios a la hora de ahorrar en costes y gestionar de la mejor manera la venta del producto. Pero estamos en un momento parecido al del arroz de hace más de cincuenta años, y la solución no está en la venta de las parcelas, porque lo que vendes ya no lo tienes, sino que tenemos que transformarlo de alguna manera para hacer rentable el territorio del que disponemos.
–P: ¿Cree que los grupos de presión social son conscientes de esa realidad a la que usted hace alusión?
–R: En la política local me pasa muchas veces como en la política nacional cuando veo las noticias, porque criticar es muy fácil, pero aportar ideas no lo es. Y el gran problema de los grupos que integran la oposición en este pueblo es que se pasan las legislaturas cuestionándolo todo, pero aportando muy poco.
–P: ¿Pero tenía a todos los grupos municipales integrados dentro de la Junta de Gobierno?
–R: Sí, fue una idea mía desde principios de legislatura para que pudieran colaborar y que la información les llegara de primera mano. Así se pretendía que tuvieran las mismas oportunidades que el equipo de gobierno para trabajar por el pueblo, y en esa línea hemos aprobado los presupuestos de 2025 y estamos trabajando en los de 2026.
No obstante, las ideas innovadoras de cara a ellos brillan por su ausencia.
–P: Hay quien no entiende que los concejales de la oposición estén dentro, porque eso, en cierta forma, coarta la fiscalización de las actuaciones del ejecutivo…
–R: Quizá ese pensamiento derive del desconocimiento del funcionamiento del Ayuntamiento. Un concejal o concejala tiene derecho a tener toda la información que se esté manejando dentro del consistorio, y con esto quiero recalcar que aquí no hay actuaciones inquisitoriales, ni se oculta documentación, porque los funcionarios no se deben al equipo de gobierno sino a su trabajo, aunque a algunos concejales les cuesta entenderlo hasta el punto de pedirme los papeles a mí, cuando no me corresponde hacer de filtro. Por eso creí en su momento que tener a todos dentro de la Junta de Gobierno era una forma más fácil de agilizar el trabajo del día a día al encontrarnos nosotros en minoría; en definitiva, es una herramienta más para hacer política, negociar y llegar a acuerdos con la oposición por el bien del pueblo.
–P: A la vez también les permite a algunos de los grupos del mismo color político que gobierna en la Generalitat reivindicarse con folletos en los que, poco menos, se autoproclaman artífices de las subvenciones que llegan tanto a nivel autonómico como provincial…
–R: Ni para lo bueno, ni para lo malo, porque si te cuelgas la medalla de que nos han dado el Pla Edificant para el colegio Rosalia Bondia, también deberías colgártela por que, por tu culpa, las obras de la calle Sant Miquel no se terminan. Estamos trabajando conjuntamente a la hora de pedir subvenciones y, con ello, tal como ha pasado en legislaturas anteriores, hemos llamado a personas de diferentes partidos para que nos echaran una mano, no en cuanto a prioridades frente a otros, sino para ejecutar algunos proyectos. Pero hemos visto cómo funcionan las administraciones del Partido Popular y muchas veces los criterios de adjudicación de subvenciones no son únicamente objetivos, porque también tienen su componente subjetivo. Por tanto, lo que tampoco podemos hacer es estar en contra de los partidos que están gobernando, y así tratamos de aprobar presupuestos con el visto bueno tanto del Partido Popular como de Compromís, y las medallas que se las cuelgue quien quiera.
–P: Y en esas ayudas, ¿ha tenido su importancia el Pla Edificant en el colegio Rosalía Bondia…?
–R: A pesar del largo historial de problemas que ha sufrido este proyecto, esperamos que en esta adjudicación podamos sacarlo adelante, porque ya es la tercera vez que se rehace el proyecto. Primero, por las condiciones del pabellón a construir, en las que tengo que discrepar del Consejo Escolar por estar situado a veinticinco metros del municipal y porque, por las mañanas, podría cederse y destinar la inversión a mejorar los accesos, las aulas o el aislamiento térmico o acústico; pero es una decisión de sus integrantes que debo respetar. Esta circunstancia, junto con que el importe del dinero era diferente, ha ido retrasando el proceso, y a todo ello se ha sumado el tema de la normativa de eficiencia energética, que obligaba a que la instalación contara con placas solares. Sin contar que en la primera licitación no se presentó ninguna empresa, que hubo una denuncia ante el TAR que lo paralizó y que nos ha costado sacar adelante una tercera.
–P: Pero dicen que le queda el Centro de Interpretación del parque natural, que parece enquistado…
–R: Es que el tema es una reivindicación más antigua incluso que la eliminación del punto negro del Hostal de Sant Jaume en la N-332, y mira que a este llevamos años dándole. El Plan de Ordenación de los Recursos Naturales de la marjal establece que debe haber un centro de recepción, que no se ha hecho porque en el parque se han realizado muy pocas inversiones.
–P: Hablando del parque y de sus repercusiones, siempre se ha dicho que conllevaría la eliminación de la carretera CV-678 de Pego al Mar, y ahora resulta que lo que se va a hacer es suprimir el punto negro que suponía la intersección entre esta y la N-332. ¿Qué supone esto para los pegolinos?
–R: El tema del cruce ha sido una lacra para los pegolinos, primero cuando había que pasar por la vía del tren y después cuando se suprimió esta y cambiaron el trazado. Y es que, en el acceso a las segundas residencias de la gente de Pego, han quedado muchas víctimas por accidentes de tráfico, y acabar con esto para los equipos de gobierno que he presidido era una prioridad. Por ello, nos ha costado tocar la puerta a seis o siete ministros de Fomento para que asumieran el compromiso de llevar a cabo un proyecto que arranca en 2007 y que ya se ha iniciado con las tareas de desbroce por parte de la empresa Torres Cámara, como adjudicataria.
En cuanto a la repercusión de esa vía de tránsito en el parque, creo que resulta más negativa la línea aérea de alta tensión que lo atraviesa y que, según lo hablado con los responsables de Iberdrola, esta compañía estaría dispuesta a eliminarla, aunque las distintas administraciones no se ponen de acuerdo. Yo creo que la mejor solución sería soterrarla por el mismo trazado de la CV-678, porque el tendido que pasa por dentro del parque es un peligro potencial para las aves migratorias que anidan en este espacio natural.
–P: ¿“Intermedio” para el nuevo teatro municipal? ¿Y de ello, quién se tiene que hacer cargo?
–R: Es un proyecto muy ilusionante. Hay que recordar que, para escoger al ganador, se debía sumar por un lado los votos de los vecinos y vecinas y, por otro, los de los miembros de un jurado experto en la materia. Los primeros eligieron la propuesta ‘Entreacte’, y ahora solo falta conocer el resultado de las votaciones de los miembros del jurado, que se sabrá en breve. Lo que sí se puede confirmar ya es que el dinero para la redacción del proyecto que se elija finalmente ya está consignado en los presupuestos. El siguiente paso será buscar la forma de financiar la ejecución de la obra. Seguiremos los procedimientos que siempre hemos seguido en proyectos similares: buscar ayudas donde sea necesario, tocar puertas, por ejemplo, del IVACE o de los Fondos Europeos, tal como hicimos, por ejemplo, con la nueva biblioteca municipal. También hay que remarcar que, gracias a la gestión del departamento de Hacienda desde que está este equipo de gobierno, se ha podido acabar con las deudas bancarias, que ascendían a cerca de 12 millones de euros. Esto nos otorga margen para poder afrontar retos como la construcción del nuevo teatro o infraestructuras importantes, como la ampliación de la residencia de mayores.
–P: Vamos ya cuesta abajo en esta legislatura. Resulta casi obligatorio preguntar si optará a la reelección, porque se ha jubilado recientemente y no sé cómo estará de ganas después de casi catorce años al frente de la gestión…
–R: Yo desde el principio he considerado que esto era un trabajo y, por tanto, he tratado de ejercerlo de la manera más profesional posible. Me jubilé recientemente debido a la discapacidad que tengo, hecho que supone un ahorro para el Ayuntamiento del sueldo que tenía como alcalde.
En cuanto a volverme a presentar, a día de hoy la idea es ser otra vez el candidato del Partido Socialista, dado que la gente con la que trabajo sigue confiando en mi persona. Pero esto tiene que ser aprobado por la asamblea local del PSPV; aunque, si surge otra alternativa, no tendré ningún problema en dar un paso atrás.
